domingo, 15 de diciembre de 2013

A otra

Odio verte con otras. Incluso odio el simple roce de su nombre en tus pensamientos. Odio imaginar que imaginas a otra. Y me odio a mi por odiarlo. Me odio por acongojar a mi corazón de esta manera. Me odio por no respetar tu libertad. Me odio por haberte nombrado mío, cuando ni siquiera tengo derecho a tenerte. Que te mereces que te quieran más y mejor de lo que yo nunca podré hacer.
Odio ser así, y saber que seguiré sintiendo estas putas lágrimas quebradizas en mis ojos cada vez que el nombre de cualquier chica se acerque a ti. Saber que tu no lo harás jamás. Que tu amarás, de verdad y bien. A otra.

sábado, 7 de diciembre de 2013

I) Es ese gesto, que no es ni boca ni ojos ni manos. Ni es uno, ni cien. Son todos. Los tuyos. En mi cabeza.

II) El magnetismo con su mente era más fuerte que (...) Que nada.