Es
difícil escojer el camino correcto, o incluso
escojer el más incorrecto, y no perjudicar a alguien. Todo es una cadena de la que estamos unidos unos con otros, sentimentalmente. Es casi imposible, no actuar, y seguidamente defraudar a alguien que quería que hicieras lo que quería él, o no sentir, y consecuentemente, hacer que otro sienta dolor porque tu sientes lo que creía
pertenecerle, por otra persona. Es así,
difícil. Pero no acaba ahí. Es
difícil escojer el camino correcto, pensando en que sera lo mejor para ti.
Escojer el que en un futuro te conlleve más felicidad. Más que
difícil es
improbable que seas tan adivino, de
escojer el más correcto. Y si, a eso se le suele llamar suerte.
A unos les acompaña y a otros no, así que
escojer el camino correcto, es cosa de ella, y si decide no acompañarte, simplemente, tienes que aferrarte, a eso que dicen de: "otra vez sera".
No hay que actuar
consecuentemente para
escojer el camino más perfecto, la suerte se encarga de
acercártelo, o
alejártelo, y simplemente tenemos que dejarnos llevar, que si ella quiere llevarnos a él, nos llevara..