sábado, 14 de marzo de 2009

Suspiro, cuando las palabras son insuficientes para definirlo. Cuando parece que la noche me ha robado las horas, y solo es de día, en las primeras horas de sol. Intentando cerrar la caja de pandora que, tu abriste sin pensar en mi. Desgasto mis recuerdos de tanto usarlos. Muero cada vez que me desvelo para nombrarte, cada vez que mi voz va rasgando mi boca, cuando pronuncia tu nombre.





...y puede que el calor de la primavera irradie nuestro amor, o ilumine nuestro destino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Blog Archive